Estas galletas suaves y gruesas con chispas de chocolate cremosas derretidas en una masa fragante seguramente se convertirán en tus galletas de chispas de chocolate favoritas.
Esta receta para hacer galletas suaves con chispas de chocolate es extremadamente simple y fácil de hacer incluso para los principiantes en la repostería. No es necesario enfriar la masa, solo sigue los pasos y tendrás galletas deliciosas y suaves de inmediato.
El secreto para obtener galletas suaves con chispas de chocolate que se derriten en la boca radica en derretir completamente la mantequilla, usar la cantidad correcta de harina y no hornearlas demasiado tiempo. La mantequilla derretida ayudará a que las galletas tengan una textura suave, mientras que la cantidad justa de harina evitará que las galletas se aplanen o se inflen demasiado.
Otra ventaja de esta receta para hacer galletas suaves con chispas de chocolate es que puedes personalizar la cantidad de azúcar y el tipo de chispas de chocolate a tu gusto. Si prefieres las galletas más dulces, puedes agregar un poco más de azúcar. También puedes usar chispas de chocolate negro, chispas de chocolate blanco o combinar ambas para crear un sabor único para las galletas.
La mantequilla se derrite completamente antes de mezclarla con el azúcar y los huevos. Esto ayuda a que la mantequilla se incorpore uniformemente con los demás ingredientes, creando una textura suave para las galletas.
Después de mezclar bien los ingredientes húmedos, agregarás gradualmente la harina, el bicarbonato de sodio y la sal, mezclando hasta que la mezcla forme una masa suave. En este punto, puedes agregar las chispas de chocolate y mezclar bien a mano.
Forma bolitas pequeñas con la masa, colócalas en una bandeja para hornear forrada con papel de hornear y hornea en un horno precalentado a 350 grados F (175 grados C) durante unos 9-11 minutos. Ten en cuenta que no debes hornear las galletas demasiado tiempo para que mantengan su suavidad.
Deja que las galletas se enfríen en la bandeja para hornear durante unos 30 minutos antes de disfrutarlas. Las galletas suaves con chispas de chocolate saben mejor cuando se comen con un vaso de leche fresca y fría.
También puedes guardar las galletas en un recipiente hermético a temperatura ambiente durante 3-4 días o en el refrigerador durante una semana. Si deseas conservarlas por más tiempo, puedes congelar las galletas después de hornearlas.
Con esta receta para hacer galletas suaves con chispas de chocolate, tendrás galletas deliciosas y suaves que se derriten en la boca, conquistando incluso a los paladares más exigentes.
Esta receta también es muy flexible, puedes agregar nueces, mermeladas o especias favoritas a la masa para crear nuevos sabores.
¡Prueba ahora esta receta para hacer galletas suaves con chispas de chocolate y comparte tus resultados con nosotros! ¡Te deseamos éxito!