Luis Vasquez, la mente detrás del proyecto musical The Soft Moon, siempre evoca melodías sombrías y pesadas, que profundizan en los rincones oscuros del alma humana. Su música, especialmente el álbum "Criminal", se considera un viaje inquietante a través de las emociones personales de Vasquez, donde el miedo a la muerte y el autointerrogatorio siempre están presentes.
Vasquez creció en un entorno católico estricto, lo que le inculcó sentimientos de culpa y una persistente inseguridad. Siempre sintió que estaba rompiendo las reglas, incluso cuando no existían realmente. "Crecí en una familia católica con una madre muy estricta. Me volví bastante consciente e inseguro porque había demasiadas reglas. Ahora, de adulto, siento que estoy constantemente rompiendo reglas aunque probablemente no lo esté. Pero en mi mente, todavía estoy en mi infancia y todo lo que hago se siente mal…"
Luis Vasquez de The Soft Moon actuando en el escenario, iluminado con luces tenues.
Precisamente por su obsesión con el pasado, la música de The Soft Moon, con letras que giran en torno al autodesprecio, el miedo y el dolor, ha despertado la curiosidad de muchos sobre la visión de Vasquez sobre la muerte. "Le tengo miedo. Aunque sé que también es algo hermoso. La vida no existiría sin la muerte. Pero incluso si parece que me gusta la muerte, no puedo esperar a morir porque mi música es oscura, le tengo miedo. Le tengo miedo a una muerte dolorosa. Creo que tal vez uso esto como un recordatorio para vivir mejor, tratando de encontrar una manera de disfrutarlo, de encontrar la paz". Luis Vasquez comparte su miedo a la muerte.
"Criminal" es un punto de inflexión en la carrera de Vasquez, cuando se centró más en la letra y la voz. Encontró una manera de expresar sus emociones con palabras, en lugar de esconderse detrás de los instrumentos. "Al principio, no sabía si estaba enojado o deprimido. No sabía cómo explicarlo. Pero ahora que soy mayor y me entiendo mejor, la música me está ayudando a explorar mis emociones escribiéndolas en letras".
La confianza de Vasquez en su papel de cantante también aumentó significativamente, tras un proceso de "crecimiento personal como músico". Ya no duda en revelar los rincones oscuros de su alma, expresando más ira y agresividad en su música. "En este álbum, me llamo criminal porque tengo conciencia de culpa y mucho autodesprecio. Estoy tratando de superar eso. En el álbum, revelo mucho sobre mí y soy muy específico con lo que estoy expresando. Estoy asumiendo algunos riesgos con este álbum: es más enojado y agresivo".
También se cree que mudarse a Berlín, una ciudad sombría y fría, influyó en la música de Vasquez. "La ciudad me ha moldeado de una manera negativa, debo decir. Creo que esa es parte de la razón por la que este disco es bastante enojado. Berlín me ha mostrado un lado oscuro de mí mismo. Hay mucha libertad ahí fuera y si no tienes disciplina, puedes tomar algunas decisiones bastante malas. Y he tomado algunas decisiones bastante malas, todavía las estoy tomando. Me ha enseñado lo desordenado que estoy. Siento que tal vez toda esta experiencia era necesaria y lo descubriré más tarde. Pero creo que tenía que ver la oscuridad y hacer este disco para poder crecer". Sin embargo, también reveló planes de regresar a Los Ángeles, donde hay sol, amigos y familia, para buscar paz y estar más cerca de su madre. ¿Traerá este cambio de entorno un The Soft Moon más brillante en el futuro? La respuesta aún está en el aire.