La generación de mujeres actual está presenciando el colapso del arquetipo de "girlboss": mujeres exitosas, poderosas pero siempre exhaustas y estresadas. Se preguntan: ¿Hay alguna manera de tener éxito sin sacrificar la salud y la felicidad? La respuesta está en la "era soft girl", un estilo de vida que enfatiza el equilibrio, el cuidado personal y el disfrute de la vida.
La "era soft girl" no es solo una tendencia en las redes sociales, sino que también refleja un cambio en la concepción del éxito para las mujeres. En lugar de perseguir la carrera a toda costa, priorizan la salud mental, las relaciones y las experiencias personales. Buscan la paz en una vida más lenta, alejándose de la presión de la cultura del "hustle" – trabajar sin parar.
Erica Dowdy, fundadora de una empresa de cannabis con su madre, se dio cuenta de esto después de un viaje a Europa. Compartió: "Me di cuenta de que los europeos tienen un equilibrio maravilloso entre el trabajo y la vida personal. Decidí que ese sería el mejor recuerdo que me llevaría a casa". Dowdy declaró en TikTok: "Ya no quiero ser una 'girlboss’… Creo que ser 'girlboss' está un poco pasado de moda".
Una joven relajándose y disfrutando de un momento de paz, representando el espíritu de la era soft girl.
Este punto de vista es apoyado por muchas personas. Una usuaria de TikTok compartió: "La cultura del 'hustle' está diseñada para el ciclo de 24 horas de los hombres, no para el ciclo de 28 días de las mujeres… Las mujeres no tienen la culpa de no poder prosperar en un mundo que no está hecho para ellas".
En el mundo de la "soft girl", dejar un trabajo estresante para seguir una pasión, viajar, experimentar la vida se considera un éxito verdadero. Las mujeres que dejan las empresas para trabajar en hostales, vivir cerca de la naturaleza son vistas como modelos ideales.
Sin embargo, surge una pregunta: ¿Quién pagará el estilo de vida "soft girl"? ¿Significa renunciar a la cultura del "hustle" que las mujeres deben sacrificar su independencia financiera? Este es un tema polémico que los partidarios de la "soft girl" rara vez mencionan.
La "era soft girl" no es una fórmula universal para todos. Para aquellos que todavía tienen que trabajar para ganarse la vida, este estilo de vida es un ideal al que aspirar más que una regla estricta. El auge de la "soft girl" no es solo una protesta contra el arquetipo de la "girlboss", sino también una reacción a las dificultades de la vida moderna, algo que todas las generaciones enfrentan. Expresa el anhelo de una vida más equilibrada, feliz y significativa.